7 Plan en marcha

-Jack-

Fijó un blanco desde el cielo, apunto y disparo. me acerco a ver como resulto, falle, de nuevo, es una pareja que está terminando, le dispare a la chica con lo cual solo he conseguido causarle más dolor del que ya tenía, extiendo las alas y vuelo hacia casa, que en realidad es un apartamento de lujo vacío, me desvisto y entro al baño a tomar una ducha, siento como el agua fría recorre mi cuerpo, golpeó la pared con toda mi fuerza y se rompe un poco, estoy frustrado, enojado, quiero maldecir con todas mis fuerzas pero no puedo, no es correcto, salgo del baño y me visto con un pantalón blanco, y una playera negra con la palabra ángel escrita al frente, salgo de casa rumbo a la escuela, apenas es martes y ya empiezo a detestar esa cosa que los humanos llaman <<educación>>.

Me pregunto cómo podré  acercarme a Elizabeth sin que se asuste, he visto muchas películas románticas porque a pesar de que yo doy la pauta para formar parejas, nunca me quedo a ver cómo se forman o como terminan, así que no tengo idea de como conquistar a una chica, en varias películas las chicas se enamoran de tipos arrogantes o que las molestan así que probare un poco esa táctica, los chicos buenos siempre pierden y yo no quiero perder.

Llego a la escuela y veo a Elizabeth  me acerco un poco y veo a otra chica de cabello blanco que habla muy animadamente con ella, un escalofrío me recorre el cuerpo, corro hacia ellas pero antes de que llegue la chica de blanco se va.

—¿Quién era?

—¡Oh!, Jack… Hola...— Responde Elizabeth enfatizando que no la salude.

—Hola

—Era una chica que estaba perdida, dijo que ayer no vino y que la escuela era grande, no sabia ni donde estaba su salón, era un poco rara, me dio las gracias y me dijo que nos volveríamos a ver….

—¿Cuando?

—¿Que?...¿yo que voy a saber?, ¿me viste cara de adivina?

—No…

—A todo esto…. ¿por qué la pregunta?

—Esa chica me produce una sensación extraña

—ooohhh… ¿te gusta?

“¿Como evito la pregunta?... ¡ah! ¡ya se!, pondré en practica lo que vi en las películas”.

—¿Por qué preguntas?— hablo mientras me acerco a su rostro invadiendo su espacio personal—¿te molesta?— susurro a escasos centímetros de su boca, Elizabeth se sonroja un poco y me empuja.

—¡¡Claro que no!!— grita mientras camina a grandes zancadas al salón.

“Wow no puedo creer que funcionara, acaba de sonrojarse, eso significa que tal vez sí puedo gustarle”, me siento tan feliz, tal vez ella no lo nota pero mi corazón va tan rápido que parece un zumbido, estuve a punto de besarla y dios sabe que ganas no me faltaban, lo que casi me falta es el control, tenía tantas ganas de hacerlo, pero creo que sería muy apresurado, ya he olvidado toda la frustración y enojo que antes sentía, solo ella me puede provocar algo así, el amor es una cosa increíble, ¿como no me había dado cuenta sí estoy en contacto con el todo el tiempo?, cada vez quiero mas quedarme a su lado.

—¡MUÉVETE!— grita desde la puerta del salón.

—¡Ya voy!—le respondo lanzando una sonrisa al aire y mirando al cielo—No me voy a rendir tan fácil, ¿escuchas?— creo que este es el comienzo de mi historia de amor.